Considerando el trabajo de un artista en una dinámica evolutiva, dos directrices acotan el camino de esta obra:

Primero esta el compromiso con la luz para garantizar su autenticidad, lo cual se logra principalmente gracias a los soportes analógicos. No hay distanciamiento del campo de la fotografía.
No se trata de marginalizar la fotografía digital de forma caprichosa o cultural, ya que se le sigue cuestionando respecto a su status después de realizar abstracciones con alejamientos de la significación de los objetos y de representaciones

Se trata también de una búsqueda de abstracción plástica completa, capaz de transmitir reflejos de su época.